Autor: Luis Fernández-Cotero

  La Asociación Española de Barcos de Época y Clásicos se creó en septiembre de 2009 para rellenar un vacío bastante importante en el panorama náutico español: precisamente el de la falta de una organización dedicada plenamente al fomento y a la preservación de nuestro patrimonio náutico deportivo. En efecto, la R.A.N.C., aún habiendo participado desde el primer momento en la regeneración del C.I.M. (Comité Internacional del Mediterráneo), como máxima autoridad internacional para la medición en las regatas de barcos clásicos, no es una asociación integralmente dedicada a estos barcos. La pasión de su entonces presidente Ricardo Balil por los clásicos, así como la sensibilidad que hacia ellos han tenido sus dos últimos presidentes, Jesús Turró y Augusto Vallvé, han favorecido el compromiso de esa asociación a nivel internacional, pero no han llegado a aglutinar, como es de desear, el interés de todos los armadores. Lo que desde la A.E.B.E.C. queremos es, precisamente, representar a todos los armadores de barcos clásicos y ayudarles en sus preocupaciones y desvelos, por lo que, según sus estatutos, la Junta de Gobierno tiene que estar mayoritariamente compuesta por dichos armadores y el presidente tiene que ser, obligatoriamente, propietario de un barco antiguo. El primer objetivo de esta asociación, como  está recogido en sus Estatutos (art. 2), es el de fomentar la cultura náutica tradicional, la restauración y la conservación de los barcos clásicos, pero también la construcción de réplicas, para asegurar la pervivencia de unos conocimientos que corren el riesgo de desaparecer por falta de actividad. Para ello, nos hemos propuesto difundir los conocimientos materiales del arte de la construcción clásica y también de elementos intangibles, como...